Cultivando setas en casa
En la actualidad uno de los hobbies que más entusiastas está atrayendo, es el cultivo casero de setas, una actividad que puede resultar muy interesante y que al mismo tiempo permite disfrutar de deliciosos y saludables platillos.
Pero que son las setas y como se cultivan?
Las setas son fructificaciones de hongos, estas se cultivan mediante la mezcla de un sustrato o medio de crecimiento con el inoculo del hongo deseado, el sustrato es colonizado y consumido por el hongo para luego generar las setas.
Esto suena muy sencillo, pero en la práctica existen diversas dificultades que hay que superar para lograr tener un cultivo exitoso de setas.
Sustrato de crecimiento:
Generalmente los hongos que producen setas crecen y se alimentan de materias vegetales, estas materias están conformadas principalmente de carbohidratos simples y complejos, que sirven de reserva de energía y estructura para las plantas.
Generalmente para el cultivo de hongos se utilizan residuos de la agricultura como bagazo de caña de azúcar, pulpa de café, olote de maíz y rastrojos de diversos cultivos, pero también se puede cultivar setas en sustratos generados en la ciudad, como cartón, papel, residuos de café molido, aserrín etc. Existe también un método sencillo de producción de hongos, utilizando troncos de madera
Generalmente los sustratos utilizados para el cultivo de setas son acondicionados mediante un tratamiento térmico, químico o biológico, que permite que el hongo aproveche los nutrientes en ausencia de competidores.
Inoculo:
Se llama inoculo al medio que transporta células vivas de la cepa de un hongo especifico, hasta el sustrato de crecimiento
Generalmente la inoculación consiste en mezclar un porcentaje de inoculo en relación al peso del sustrato a sembrar. Hay diversos tipos de inoculo que se usan según las necesidades de cada proyecto.
El inoculo puede ser adquirido en el CIMT, debe ser encargado por lo menos 10 días antes para poder garantizar su máxima vitalidad.
Semilla (grain spawn): Está elaborado a partir de granos de cereales, que son hidratados, esterilizados y colonizados por las células de un hongo. Es muy útil cuando se trabaja con sustratos formulados.
Cuñas inoculantes (plug spawn) son: pequeños cilindros de madera recubiertos con células de un hongo especifico, estas son introducidas dentro de orificios hechos con taladro, en troncos de madera.
Inoculo líquido: jeringas con células de una cepa específica, suspendidas en solución acuosa, son muy útiles cuando se trabaja con sustratos estériles.
Proceso del cultivo:
Básicamente, existen dos métodos para cultivar hongos, según el tipo de sustrato y cepa de hongo a utilizar:
1) Siembra en sustratos estériles:
Este método consiste en colocar el sustrato en un contenedor hermético que pueda ser sometido a altas temperaturas, puede ser botes de vidrio o bolsas de plástico resistentes al calor, el recipiente debería poseer un filtro que impida el paso de esporas y microorganismos hacia el sustrato y que a la vez facilite el intercambio gaseoso.
Una vez que se ha colocado el sustrato en el recipiente sellado, se esteriliza con vapor, ya sea a presión atmosférica o con autoclave u olla de preson, durante un tiempo que dependerá de la cantidad de sustrato que se use.
Finalmente, el sustrato debe enfriarse hasta la temperatura ambiente para ser inoculado, la inoculación debe hacerse en un ambiente muy limpio para evitar contaminación del sustrato.
Este es el único método con el que pueden prosperar una gran variedad de hongos
2) Siembra en sustratos semi- estériles
Consiste en desinfectar el sustrato con vapor o agua caliente, pero sin colocarlo en un recipiente hermético, a diferencia del método estéril, en este se realiza la inoculación de una forma más expuesta y sencilla y el sustrato no se ve atacado por competidores. Cuando la mezcla inoculo-sustrato se ha realizado, el material se introduce en bolsas plásticas perforadas para su colonización. Solo algunos hongos pueden prosperar con este método.
Incubación y cosecha
Luego de la inoculación los sustratos deben pasar por un periodo de incubación, que es cuando el hongo se expande por todo el medio alimentándose de él.
Cuando el hongo ya ha cubierto todo el sustrato, y se encuentra en las condiciones adecuadas, comenzara a producir fructificaciones que en pocos días pueden ser cosechadas.
En ocasiones, y si el clima lo permite, podemos cosechar las setas al aire libre sin tener que regular parámetros ambientales, en otras ocasiones se deberá constar con una edificación destinada a la producción de hongos, esta puede ser un pequeño cuarto, o un pequeño vivero en donde podamos mantener la humedad, controlar entrada de aire, luz, y si es posible regular la temperatura.
Con un poco de paciencia y trabajo, en pocas semanas podemos disfrutar de saludables y deliciosas setas que nos darán además de un placer culinario, la satisfacción de haber producido nuestro propio alimento.